En 1998 Geri Halliwell dejó las Spice Girls para emprender su carrera en solitario. La cantante lo había conseguido todo con el famoso grupo: fama, éxito, millones de discos vendidos... pero estuvo a punto de perder lo más valioso e importante: la vida, pues ese mismo año empezó a perder peso considerablemente.
Doce años después, Geri ha reconocido que padeció bulimia nerviosa y lo ha podido contar gracias a Robbie Williams: "Me preocupaba engordar. Comía muchísimo y me sentía gorda, empezaba a encontrarme mal, era horrible", confesó en el programa británico de televisión "Piers Morgan?s Life Stories".
En efecto, la intérprete de It's Raining Men llegó a pesar 44 kilos tras un proceso de adelgazamiento cuando Williams le aconsejó que buscara ayuda profesional. "Robbie conocía mi bulimia y me aconsejó que buscara ayuda. Me contó que debía ir a rehabilitación y posiblemente, me salvó la vida. La bulimia hubiera ido a peor sin él. Siempre le estaré agradecida, siempre" añadió.
Y es que la cantante, tras abandonar las Spice Girls, vio en Williams su mejor apoyo: "Estaba sola, como si él fuera la única persona que pudiera entenderme después de su experiencia con Take That". Son palabras de Geri Halliwell, que a sus 37 años por fin se encuentra "feliz y saludable".
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